Este circuito se desarrolla en la Península de Yucatán que fue parte del territorio ocupado por la región Maya en la antigua Mesoamérica. Los Mayas dejaron huellas de lo que fue una de las más importantes civilizaciones.
La Actual Península de Yucatán está dividida en tres entidades federativas de la República Mexicana: Campeche, Quintana Roo y Yucatán; es aquí donde se ubica esta ruta Maya Arqueología.
La ruta contempla la visita a las zonas arqueológicas y está enfocada hacia los segmentos de turismo científico y cultural, con algunas actividades para el turismo de naturaleza.
Mérida. Fundada hace más de 500 años sobre las ruinas de la ciudad maya de T’ho, Mérida es conocida como la “ciudad blanca“, por sus edificios coloniales hechos de cal y canto. Cuenta con un Aeropuerto Internacional y terminal de autobuses, que comunican al destino con diferentes ciudades de México y el extranjero. Entre sus principales atractivos, se encuentran el Museo Arqueológico de Yucatán, alojado en el Palacio Cantón y la avenida más importante de esta ciudad: el Paseo Montejo, en el que destacan antiguas casonas del siglo XIX y los edificios de reconocidos hoteles combinando así, historia y modernidad; al norte de la ciudad se puede visitar la Zona Arqueológica de Dzibilchaltun la cual cuenta con un Cenote en donde es permitido nadar.
Izamal (pueblo mágico). “Ciudad de las tres culturas”, pues en ella se combinan rasgos de su pasado prehispánico, del período colonial y de la época actual, fue una vez un enorme centro ceremonial maya. Destaca la pirámide de Kinich Kak Moo, que es la tercera estructura prehispánica de mayor volumen en México.
Chichen-Itza. Actualmente es una de las 7 Maravillas del Mundo Moderno, durante el equinoccio la gente acude a apreciar este fenómeno, en el cual se ve una proyección solar serpentina, consistente en siete triángulos isósceles de luz, invertidos, como resultado de la sombra que proyectan las nueve plataformas de ese edificio, al ponerse el sol en el templo de Kukulcán.
Valladolid. Fundada en 1543 por Francisco de Montejo “el sobrino”, sobre la antigua ciudad maya de Zací. Conserva el mejor ejemplo colonial. Cuenta con una adecuada oferta de servicios turísticos que permiten la estancia de los turistas en una forma cómoda y segura. Entre los atractivos: el Parque Central, el Palacio Municipal, el Mesón Del Marqués, y La Parroquia de San Gervasio. A corta distancia del centro también se encuentra el Cenote Zací, un bello paraje de agua y piedras, de fácil acceso, rodeado por una frondosa vegetación, que tiene además un restaurante y un mirador bajo una gran palapa. Al oeste de la ciudad se encuentra el Cenote Dzitnup, conocido también como “La cueva azul”. El sol atraviesa una pequeña entrada natural en la parte superior de la bóveda, iluminando el interior y creando así una imagen impresionante con el reflejo del agua.
Las zonas arqueológicas que se pueden visitar:
Ek Balam (su entrada es posible a través de un “Sacbé” que conduce a una de las pocas entradas que permiten las murallas que la rodean); se recomienda visitar la Acrópolis, una de las más grandes de Mesoamérica en donde se aprecian estelas esculpidas con personajes en sus tronos.
Cobá. Rodeada de 5 lagos naturales y de una gran variedad de animales salvajes que aún la habitan. En Cobá se encuentran cerca de 45 caminos o calzadas, conocidos con el nombre de “sacbé” (camino blanco), que conectaban a la ciudad con otros sitios como Yaxuná e Ixil, estimándose que cumplían una función ceremonial más que económica. A la entrada del yacimiento arqueológico se encuentra la construcción conocida como “la iglesia”, que contiene numerosas figuras y símbolos mayas. El juego de pelota y el basamento piramidal de los 7 cuerpos que es el más alto del norte de la península. Esta zona cuenta con estacionamiento, baños, restaurante y guías de turistas.
Tulúm. Es la única ciudad maya construida junto al mar y está rodeada por desarrollos turísticos de la Riviera maya; es el tercer sitio arqueológico más visitado de México, después de Teotihuacán y Chichen-Itzá. En Tulúm se pueden visitar las zonas arqueológicas de Xel-Ha y de Algunas huellas coloniales: Tepich, Chunhuhub y Tihosuco así como el Museo de la Guerra de las Castas y el Santuario de la Cruz Parlante, en donde se conserva el sitio de culto de los mayas cruzob y que les integró para continuar la rebelión maya hasta el presente siglo. Antes llamada “Chactemal” actualmente es sede del Aeropuerto Internacional de Chetumal. Ofrece turismo de naturaleza, como la Laguna Encantada, la Laguna Milagros con aguas transparentes, la Laguna de Bacalar, ideal para practicar buceo, y el Cenote Azul ubicado al norte de la zona arqueológica de Oxtanka. Con este recorrido se inicia lo que es conocido como la “Ruta Rio Bec”. El sitio está conformado por una serie de conjuntos arquitectónicos de carácter ceremonial y residencial. Es de gran interés la plaza de las estelas, el juego de pelota, y el castillo, adornado con mascarones de estuco, narigueras, bigoteras, y orejeras representando a la deidad del sol Kinich Ahau.
Dzibanché y Kinichná. Dzibanché significa “escritura sobre madera” y hace alusión al dintel de madera que aún se conserva en el Edificio VI. Algunos templos importantes son la Acrópolis del Conjunto Kinichná, el Templo del Búho, y el Templo de los Cormoranes. Está integrado por 17 grupos arquitectónicos y numerosas plataformas de carácter habitacional dispersas a lo largo de una superficie aproximada de 5 kilómetros cuadrados. Actualmente es un proveedor de servicios turísticos de la Reserva de la Biósfera de Calakmul y las zonas arqueológicas Xpujil, Calakmul, Rio Bec, Becán y Hormiguero. Cuenta con servicios básicos como restaurantes, pequeños hoteles, guías a los sitios arqueológicos y trasporte. Es el área de reserva tropical más grande de México. Su nombre significa “Dos Montículos Adyacentes”, y es considerada Patrimonio de la Humanidad. Es el área maya con mayor número de estelas reportado: 120 en 1994, con fechas desde el año 514 hasta el 990. Es considerado el depósito más grande de valiosos textos dinásticos mayas y reconocido como la ciudad maya más grande de México.
Escárcega. Entre sus atractivos se encuentran la Laguna de Silvituc, las zonas arqueológicas en el Ejido de Silvituc, la del Haro y el Jardín Botánico El Tormento, con 350 especies sembradas. El municipio cuenta con 8 restaurantes, 10 hoteles, 12 bares y una discoteca. La capital del estado cuenta con los servicios necesarios para ser un centro de estadía. A partir de la ciudad de Campeche, es posible visitar los siguientes puntos:
Edzná. Su nombre proviene del antiguo vocablo maya-yucateco en alusión a los itzáes, y significa “Casa de los Itzáes.” Conserva una alta humedad casi todo el año, por lo que los mayas practicaron el cultivo intensivo. En la Acrópolis destaca el “Templo-Palacio” formado por un basamento piramidal escalonado de cinco cuerpos, la planta del santuario tiene forma de cruz y su techo conserva remates de crestería, los peldaños de la escalera tuvieron grabado un texto jeroglífico de 652 d.C. Alrededor se pueden visitar: Tacob, Dzibalchén, Hochob, Dzibitún, Chaltuní y Chunchintok.
Ruta Puuc. Comprende los siguientes: Labná (casa vieja), con su famoso Arco de Labná; Sayil, con los recorridos por los caminos rojos que llevan al viajero a distintos complejos arquitectónicos; Kabah (mano de cincela), con el santuario palaciego de Codz Pop (“estera enrollada”) que es un ejemplo del barroquismo en la arquitectura maya, su fachada poniente tiene más de 250 máscaras Chac y está cubierta de piedras labradas formando mosaicos desde el arranque del muro hasta la arista.
Uxmal cuenta con un peculiar estilo arquitectónico, en sus fachadas se aprecian frisos elaborados con miles de pequeñas piedras pulidas y ajustados para formar mosaicos perfectos nunca igualados en toda la zona maya. Se aprecian numerosos “chultunes” o depósitos de agua. Los edificios principales con los que cuenta Uxmal son: La Pirámide del Adivino, el Cuadrángulo de las Monjas, el Juego de Pelota, el Palacio del Gobernador, el Templo de los Jaguares y la Casa de las Tortugas, entre otros. Cuenta con restaurante, tiendas de artesanías y museo.
